En la zona centro de Vietnam, acontece una ciudad que por muchísimos años funcionó como capital del imperio y que por ende cuenta con siglos de historia; Hué.
 



Después de alrededor de 1 hora de vuelo desde Hanói, (en el Sudeste Asiático volar es muy accesible, ya que existen muchas aerolíneas low cost hoy en día) llegamos al hotel para instalarnos y salir a visitar todo lo que esta ciudad histórica tenía para ofrecernos.



La ciudad de Hué cuenta con un pasado lleno de acontecimientos y es probablemente la ciudad con mas historia de todo Vietnam. Desde el Siglo XVII estuvo conectada directamente con la dinastía de los emperadores Nguyen, quienes hicieron de esta ciudad la capital de su imperio por mas de 140 años y desde donde gobernaron 13 de sus descendientes. Hay muchas opiniones encontradas acerca de lo que representó esta dinastía para el pueblo vietnamita, pero lo que es cierto es que gracias a ellos hoy en día se cuenta con una república unificada de Vietnam, con un solo idioma y con el Delta del Mekong anexado y siendo parte fundamental dentro de la economía de su territorio.



Hoy en día se pueden visitar 7 de sus tumbas (existen 4 más pero no se recomienda ir ya que no son muy bonitas) y en nuestro viaje visitamos las 2 que son consideradas las mas espectaculares gracias a su arquitectura y diseño.
 
Desde el principio de nuestro viaje, teníamos muchas ganas de rentar una moto en algún sitio de Vietnam y nos habían comentado que Hué era el lugar ideal para hacerlo. Así que rentamos una para recorrer la ciudad durante estos dos días y fue definitivamente la mejor decisión que pudimos haber tomado, ya que no hay tantas como en Hanói o Ho Chi Minh, la gente maneja muy despacio y las distancias son ideales para poder cubrir todos los puntos de interés.



Así comenzamos nuestra aventura por la ciudad imperial, en donde el primer día teníamos contemplado visitar la Tumba de Minh Mang, la Tumba de Khai Dinh y el curioso Parque de Agua abandonado, sitio que se ha hecho muy famoso por ser altamente instagrameable.



La Tumba de Minh Mang (Templo de la “Gracia Inmensa”), es la mas alejada de las tumbas imperiales y cuenta con varios templos, pabellones, jardines y puentes, los cuales la hacen ver como si hubiera sido un gran palacio construido bajo los conceptos arquitectónicos chinos.



Aquí vale la pena perderse por sus monumentos, recorrer sus patios y simplemente admirar su belleza. Es el lugar que para mí gusto fue el mas fotogénico de toda mi visita a Hué.



Nuestra siguiente parada fue mi lugar favorito y el único que no te puedes perder en tu visita a la ciudad imperial; la famosa tumba del penúltimo emperador de la Dinastía Nguyen, «Khai Dinh».



Cuentan que este emperador fue de los menos queridos dentro de la Dinastía Nguyen, ya que se decía que estaba manipulado totalmente por los colonizadores franceses y a cambio tuvo una vida de lujos, viajes y siempre estuvo alejado de su pueblo. Por ello, su tumba es la mas espectacular de todas las de la zona (a pesar de ser la más pequeña), ya que él la mando construir al estilo francés, con todos los lujos, tesoros y derroches de su gran fortuna.



Esta tumba tardó 11 años en construirse y el Emperador Khai Dinh nunca la pudo ver terminada, ya que falleció cuando faltaban 5 años para acabar de ser construida y quién acabó terminándola fue su hijo, Bao Dai, quién después de algunos años terminó dándole fin a la Dinastía Nguyen cediendo el paso a la República de Vietnam Socialista dirigida por su líder emergente, Ho Chi Minh.



Al día siguiente, era tiempo de visitar la Ciudad Imperial o también conocida como la Ciudad Púrpura Perdida de Hué, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1993. A pesar de que me pareció que no estaba muy bien conservada, lo que yace en su interior es verdaderamente fascinante y único.



Construida bajo el modelo de la Ciudad Imperial de Beijing, la Ciudad Prohibida cuenta con varios niveles de intimidad, en donde al recorrerlos, podrás encontrarte con explanadas, palacios, pabellones, jardines y templos que harán que no quieras parar de tomar fotos y descubrir mas a fondo las raíces de esta mítica ciudadela perdida.



Acabando estos maravillosos dos días, fuimos a visitar el otro sitio del que también habíamos leído mucho en caso de hacer escala en el centro de Vietnam dentro de tu viaje. A solamente 3 horas de camino y pasando la gigantesca ciudad portuaria de Da Nang, se encuentra Hoi An, un pequeño pueblito pesquero que conserva la arquitectura tradicional vietnamita, con esa influencia francesa, japonesa y china que hace que pasear por su centro histórico a orillas del río sea una experiencia auténticamente maravillosa.



Encontramos que lo único malo es el atasque de turistas que lo visitan y por lo mismo recomendamos despertar muy temprano si quieren observar como amanece la gente local y así poder fotografiar los puntos turísticos de una manera mucho mas auténtica y solitaria. Cuando cae el atardecer, el Río Thu Bon empieza a encenderse con las velas que sueltan los locales y que ellos consideran que son de buena suerte. Ya mas caída la noche todo se torna en un auténtico espectáculo, ya que el pueblo entero se enciende con luces de colores, lámparas de bambú y velas de todo tipo, haciendo que tu vista desde alguno de sus puentes sea realmente inolvidable y las fotografías dignas de una buena revista.



Así acabo nuestro viaje por el centro de Vietnam, y a pesar de que ahora continua y quedan sitios espectaculares por visitar, esta zona quedará grabada para siempre en mi memoria.



Si tienes mas tiempo en Hué, también puedes visitar:
· Pagoda Thien Mu
· Tumba de Tu Doc
· Mercado Dong Ba
· Paseo por el Rio Perfume

Por Alfonso Maciel Cámara | 28 de Marzo, 202o